Consejería y psicoterapia son dos términos que a menudo son confundidos por muchas personas, especialmente debido a su uso intercambiable en la psiquiatría y la naturaleza superpuesta con respecto a varias características. Sin embargo, hay algunas características importantes de ellos, que ayudarán a distinguir una de la otra. La principal diferencia entre el asesoramiento y la psicoterapia es que El asesoramiento es un proceso a corto plazo, mientras que la psicoterapia es un proceso a largo plazo.

Cada sesión de psicoterapia tiene una duración de aproximadamente 1 hora. Sin embargo, el número de sesiones a realizar dependerá totalmente de cada caso concreto.

En este sentido, la duración de la terapia depende de lo complejo que sea el caso y de la disposición del paciente a dedicar energías a mejorar. Una terapia individual para problemas de ansiedad, por ejemplo, dura entre 8 y 15 sesiones; para depresiones, la duración puede ser algo mayor, acercándose a las 14 a 18 sesiones. Pero repetimos, la duración depende mucho de cada paciente y de la problemática por la que consulta.

De igual forma, los cambios asociados con el comportamiento y ánimo que se presentan con intensidad alta, serán señales para que un psicólogo te recomiende con un psiquiatra: Exceso de preocupación anormal. Pensamiento enlentecido o acelerado. Cambios extremos en el ánimo.

Hay diversos criterios que el clínico debe de utilizar para elegir entre una técnica y otra. Si tomamos una situación tipo, en la que una persona sufre determinados síntomas pero que está en disposición para poder pensar sobre lo que le pasa, comprometidos en los consecuentes síntomas y otras dificultades que pueda sentir en su vida diaria.